Los sistemas de CCTV se han convertido en un apoyo fundamental en la prevención y control de pérdida y riesgos, al igual que la supervisión para mejora de la efectividad de las empresas.
La supervisión y control de clientes y empleados es más efectiva con el uso de sistemas de CCTV, el apoyo de esta tarea con sistemas inteligentes hacen que esta labor sea muy sencilla con poco cantidad de personas.
Las áreas de cobertura son más extensas reduciendo los gastos de vigilancia y siendo más efectivos en cuanto a la seguridad.
El control de las perdidas por robos es más efectivo y no solo porque las personas saben que están siendo grabadas, sino también porque fácilmente se descubre a los culpables al revisar las grabaciones.
La existencia de sistemas CCTV por sí solo representa un elemento de disuasión, algunas empresas prefieren el uso de cámaras con tamaños y apariencias que se vean amenazantes para las personas con intenciones malas.
Las acciones delictivas quedan grabadas y pueden ser utilizadas como evidencia de delitos en juicios o acciones legales o despidos justificados de empleados que cometen irregularidades.
Los análisis de los motivos que origina fallos en la producción de empresas son corregidos al revisar los vídeos e identificar los motivos que las originan evitando que vuelvan a ocurrir.
Una preocupación recurrente de las empresas es el mejorar la calidad de servicio, en este sentido los sistemas de CCTV juegan un papel importante para la revisión de los procesos en la búsqueda de la perfección.